Mis utopías

Soy una ilusa, una idealista, todos los días como tostadas de utopías en el desayuno. Mientras no tenga mi final feliz, me como el cuento ese del amor. Pues me basta con haberlo imaginado para saber que es cierto. Voy corriendo tras los imposibles más posibles. Me apetece morir con la sonrisa en la boca. Con las palmas abiertas, como quien espera recibir, como quien las abre para dar. Prefiero los ambientes abiertos, esos que despeinan el pelo y levantan la blusa. Ya no quiero esconder la belleza de mis ojos tras la sombra del maquillaje. No quiero disfrazar mi aliento con la menta. Quiero vestirme de sueños. Se me antoja que me llamen tonta, poco práctica y nada calculadora. No me adhiero al sistema de que el hombre caza y la mujer se sienta tranquila a la espera del alimento. Se me antoja gritar lo que siento, decir lo que pienso. Me animo a correr riesgos, a darlo todo aunque que me vaya de la mierda. Se me ocurre abrir mis brazos y hacerte un espacio, ahí, donde me...